La pregunta implícita del penúltimo post sobre ser un buen padre es: qué tipo de personas necesitamos para una economía más saludable que la que pone tanto énfasis en una comunicación constante por medio de teléfonos móviles? Mi respuesta incompleta era que necesitamos gente que esté dedicada a su 'trabajo' de padre o empleado o jefe. Además, dije que nuestra economía necesita personas sensibles y afectuosas.
Es un poco raro, decir que "nuestra economía" necesita algo. Mejor sería decir que nuestra sociedad, en donde las relaciones y dinámicas económicas tienen ciertas formas, necesita dar espacio y crear est
ímulo a otra dinámica y otras relaciones de poder a lo que yo y muchos otros consideramos los malos aspectos de 'nuestra economía'.
En su comentario al penúltimo post NáN dijo que si tienes un buen trabajo, "has
de aceptar una conexión constante con la empresa (vía móviles y
ordenadores) salvo en horario de noche. NO es una opción, sino algo que
se espera de ti y que si no estás dispuesto a dar la empresa no está
dispuesta a mantener tu contrato. Solo los privilegiados que acumulan reservas de
dinero pueden estar tranquilos... pero estos pertenecen al 2 o el 3% de
la población."
Pero qué es "la empresa"? No es otra cosa que un grupo de personas que son sus dueños y su 'management'. Por qué aceptar que esa gente nos obliga de actuar como ellos quieren, no sólo durante el horario de trabajo sino también fuera de el? Por qu
é no cambiar esas imposiciones o por lo menos crear un debate o diálogo sobre esa supuesta necesidad de una comunicación constante?
José Luis (
JL Ríos) dijo en su comentario que la respuesta a mi pregunta tiene que ver con el sentido de la vida. "¿Para
qué estamos en este mundo? Si es para trabajar y acumular bienes eso es
lo que todo nuestro entorno parece decirnos, y es muy difícil salir de
esa dinámica, te puedes poner excusas durante toda tu vida. Pero no
estamos aquí para eso, y decirlo y vivir de acuerdo con eso lleva camino
de ser revolucionario, ya lo es."
Entonces, José Luis va más allá de la dinámica económica y cultural de comportarnos como "ellos" (los jefes y las gentes 'normales') quieren. Tenemos que salir de esa dinámica. Es sólo posible para el 2 o el 3% de
la población que menciona NáN?
En otro comentario,
Noite de luna dijo que "los niños, desde el primer día de cole, empiezan a ser el espejo de
esos padres obsesionados del móvil y todo lo conlleva esas prisas
desbordadas y sin tiempo para nada." Además, ella se preocupa de "esos niños
que con diez o doce años tienen cuadros de ansiedad porque le agobian
los padres a que sean los más guapos, los más listos; los de las mejores
notas; los que hagan más deportes y destaquen."
Esa 'obligación' de tener ''éxito" es uno de los grandes problemas de nuestra sociedad, creo yo. Crea mucho estr
és.
En el cuarto comentario
Isabel dijo que hay jóvenes "que a pesar de la crisis han decidido vivir según los valores
que nos hacen felices. Viven con poco, en realidad no necesitamos tanto
como los medios de producción pretenden. Y yo diría que por tener los
hijos algo mayores los atienden con una paciencia que yo no he tenido
con los míos. Pero está claro que es una minoría. A no ser que
desapareciera la televisión, no se podría influir en un cambio real,
creo. Lo que también observo en otros padres no me gusta nada."
La conclusión: no es fácil crear una sociedad con otra dinámica, pero los que quieren aportar tienen que mostrar con su ejemplo que sea posible. Si aumentemos el porcentaje de gentes 'revolucionarios' como José Luis las nombra, a digamos un 12 o el 13% de
la población, vamos por el buen camino, no cierto?