Friday, July 30, 2010

Mis propias experiencias con la violencia (2)

Algo quisiera agregar de inmediato al post anterior y esto es que el amor y la violencia pueden ser presentes en, o inherentes a, o producidos por un matrimonio de manera brutal... o sutil. Hay muchas razones, muchos caminos, muchas posibilidades. Muchas veces tiene que ver esa violencia con la juventud que uno ha tenido, con las sensibilidades, temores, angustias, rabias desarrolladas o engendradas inconscientemente.

Aquí (en la foto) mi compañera y yo cantamos sobre el amor, si me acuerdo bien la letra de la canción que escribimos para nuestra boda de plata... Y yo, en mi introducción o en mi charla después de la canción, hablé de la violencia y de mis guitarras quebradas (algunas completamente) que dio mucha risa a varias de mis tías presentes en esa gran fiesta de amor a la familia.

20 Comments:

Blogger Elvira said...

Este post más bien debería titularse Mis propias experiencias con la vida pacífica, ¿no?

6:12 AM  
Blogger giovanni said...

Sí y no. Sí, porque la fiesta era para celebrar el amor y la vida pacífica. Pero no, porque además de ser pacífica esa vida era también relativamente violenta, lleno de luchas pacíficas y violentas, conflictos, dolores... Así es la vida!

6:16 AM  
Blogger giovanni said...

Elvira, como a veces uso mal una palabra española recurrí a WordReference para ver si "engendrar" es lo que quería decir, y encontré esto:

engendrar

1. tr. Procrear, propagar la especie:
engendrar un hijo.
2. Causar, ocasionar, formar:
la violencia engendra violencia.

Interesante el ejemplo que WordReference da: "la violencia engendra violencia."

Parece que el tema de la violencia esté muy presente, hasta en los diccionarios!

6:20 AM  
Blogger Elvira said...

Pues sí, esa frase se usa mucho: la violencia engendra violencia.

¿Viste lo que te comenté en el post anterior?

7:00 AM  
Blogger giovanni said...

Ahora lo vi y lo comenté. Y qué piensas de esta segunda foto? (Ya tengo listo para publicar una tercera, pero no tengo texto.)

7:20 AM  
Blogger Noite de luNa said...

Creo que cualquiera de los dos conceptos de violencia son terribles.
Unas dejan huella exteriores y otras interiores.

No, no puedo aceptar ningún tipo de la violencia familiar.

Si alguna de ellas se hubiera ejercido entre nosotros, inmediatamente nos hubíeramos dejado el uno al otro.

Recuerdo que hace muchos años le llamé idiota y estuvo sin hablarme tres días.

Besos a los dos.

7:39 AM  
Blogger Elvira said...

Hola Giovanni: esta foto es muy simpática, pero la del post anterior tiene una ternura especial.

Hola Aquí: es importante mantener el respeto, pues hay quien dice querer y no respeta. Entonces hay que irse corriendo.

Besos a los dos

8:05 AM  
Blogger Isabel said...

Hermoso, giovanni, tengo que volver con más tiempo.

9:57 AM  
Blogger giovanni said...

Aquí, no puedo imaginarme una vida sin huellas interiores.

Ningún tipo de violencia familiar... Pero en qué mundo vives? O es que lo que es violencia para mí, no la es para ti?

El no hablarte durante tres días también es un acto de violencia (menor), aunque la palabra es un poco fuerte para un acto que es 'sólo' es desconcertante.

Besos

10:02 AM  
Blogger giovanni said...

Elvira, sí, tiene ternura especial, creo que no me di cuenta que un amigo sacó la foto.

un beso

10:04 AM  
Blogger giovanni said...

Isabel, toma tu tiempo...

10:05 AM  
Blogger NáN said...

Dos buenos posts sobre un buen tema (es cierto que la primera foto tiene una ternura especial por cómo te mira).

En español, Giovanni, tenemos dos verbos estupendos que delimitan perfectamente el contexto.

Ser violento es terrible, es una cualidad del carácter.
Estar violento, es algo momentáneo que se produce en ocasiones muy concretas.

La violencia no es ajena al ser humano. El problema es ¿quién la ejerce, para qué y en qué grado?

Supongo que hablamos de personas como nosotros, no de alguien que con violencia arrebata algo a alguien o le hace daño porque sí alguien que "es" violento, por maldad o por interés.

No niego haber si violento a veces. Incluso, como dices, en mi pareja he tenido escenas violentas, por supuesto sin contacto físico. Pero nunca los efectos nos han durado ni tres horas.

Reconocer la calidad de nuestra violencia es bueno.

10:28 AM  
Blogger Elvira said...

Muy buena la diferencia entre ser y estar violento, NáN.

Besos a todos

10:38 AM  
Blogger giovanni said...

Será posible que alguien diga: 'Soy violento, a veces.'? O debería decir: 'Estoy violento...'?

Entiendo la diferencia y es útil hacerla pero a veces el límite es fluido.

Siempre es posible determinar para qué y en qué grado alguien ejerce la violencia, esto ayuda para entenderla, pero no para cambiar el comportamiento del agresor (perpetrador?) hasta que el (o ella) lo entienda y cambie su comportamiento.

'Por supuesto sin contacto físico...' No es tan evidente para mí. Seré, estaré más agresivo que ustedes? Y los efectos han durado a máximo sólo tres horas? Qué poco. Yo diría que en el caso mío a veces ha durado años! Me refiero a la violencia psíquica por supuesto.

11:00 AM  
Blogger NáN said...

La violencia psíquica puede ser muy dura. Nosotros hemos tenido enfrentamientos duros, pero nunca rencor, así que en menos de tres horas, nos buscábamos y nos dábamos un abrazo. (A lo mejor conscientemente estoy olvidando algún período más largo).

Lo que en realidad quería decir es que no soy inmune a la violencia, pero es algo muy puntual. Es difícil que llegue hasta ese extremo. Pero no puedo dejar de reconocer que está en mi como un recurso. Y, fuera ya de la pareja, he sabido usar ese recurso (la violencia mínima necesaria) paraarreglar algún asunto. Y no me arrepiento de ello.

11:15 AM  
Blogger Noite de luNa said...

Son las 4,35 de la madrugada y no puedo dormir por vuestra culpa y vuestros comentarios leidos a las 10,30 de la noche.
Giovanni:
Una guitarra herida, siempre será una herida en la guitarra y más.
Ese "idiota" de mi parte y no hablarme tres días, no lo he olvidado después de tantos años. No se me ocurrirá de nuevo.

Nán. El que no haya contacto físico, no deja de ser violencia.

Me retiro del debate. Me pongo triste.

Besos

7:45 PM  
Blogger giovanni said...

Aquí, ojalá ya duermes. No sé qué decirte... No hay razón para ponerte triste. Una guitarra quebrada no tiene mayor importancia, como tampoco lo tienen diez platos quebrados o una loza completa. Mejor sacar la rabia, la frustración o lo que sea, en vez de dragarla, interiorizarla y dejarla viva por mucho tiempo. Hay que saber cómo luchar y cada uno lo hace de su manera. Ese 'idiota' tal vez ha tenido un significado especial en tu caso, en holandés, idioot se podría incluso usar con cariño, casi como un piropo.

Un abrazo

8:13 PM  
Blogger ana. said...

cantando al amor todo se vuelve paz, aún esas pobres guitarras tuyas te dben haber perdonado ;)

muchos besos (que linda es tu compañera!!!)

4:34 PM  
Blogger jan joost teunissen said...

Ana, cantar es muy importante y tendría que practicarlo más. Cuando toco la guitarra también todo se vuelve paz. Sí, mis guitarras han perdonado, pero las quebré de impotencia, de dolor, heriéndome a mi mismo.

baci mille

8:49 PM  
Blogger giovanni said...

Nán, te envidio por eso de las tres horas... Y por el abrazo... Y por la falta del rencor. Tenemos experiencias diferentes y somos diferentes, pienso, a pesar de algunas semejanzas (pero casi no sé nada de ti) y a pesar de considerarme 'niño bueno' a pesar de mi uso de violencia (pero ella también, siempre fue más bien una respuesta, tan llena de impotencia como la de ella). No sé si soy más franco sobre mi pasado, no creo.

La violencia psíquica ES muy dura (con letra mayúscula), aunque me cuesta reconocerlo hablando de mi mismo. No me falta el lamento de mi mismo (‘pobre yo’), para así decirlo, pero lo tengo escondido, reprimido, porque no soy capaz de culpar al otro de lo que me pasa a mí. Me costó años antes de ‘culpar’ a mi padre (muchos años después de su muerte; él murió hace 55 años) de su falta de atención para mí y de su desaparición sin aviso, sin despido, sin funeral, sin tumba, sin nada. Simplemente desapareció. Fue duro para mí, un niño que apenas tenía siete años.

10:38 PM  

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