"Rana está triste"
Estoy editando una película sobre mi (nuestra) visita a Hong Kong. Me acosté a medianoche y me desperté luego de dormir tres horas. Al igual que después del viaje a Los Angeles en California (tres palabras españoles) tengo un problema de jet lag (dos palabras ingleses), o sea de desfase horario.
Sentado temprano detrás de mi computadora (el ordenador) primero leí varios artículos sobre el uso de carbón en la producción de energía eléctrica en Alemania y cómo reducir la emisión de dióxido de carbono y de NOx en la Shipping Industry y algunos otros artículo. Luego leí el primer libro que Aafke y yo hicimos de la vida de nuestra hija desde su nacimiento hasta que ella tenía dos años, la misma edad que tiene mi nieta, la hija de mi hija, ahora. Nuestra nieta estuvo aquí nuevamente el martes (anteayer), como de costumbre, pero esta vez junto con su pequeño hermano de cuatro meses.
Me sorprendió, aunque lo sabía, la semejanza entre mi nieta y mi hija. Hacen las mismas cosas conmigo y yo hago las mismas cosas con ellas. Se parecen física y psíquicamente. En el libro sobre la vida de nuestra hija, Aafke y yo describimos lo que ella hace, dice, quiere, y lo que nosotros hacemos con ella y lo que observamos. Es un libro rico en detalles de la vida diaria de nuestra hija.
Lo que también me llamó la atención es cuánto viajamos con ella antes de que tuviera un año, a España, a Francia, a las islas holandesas. También es un libro de la muerte anunciada de mi madre, que gozó tanto de su nieta y estaba tan ansiosa por conocerla y verla crecer. Escribió un solo poema de San Nicolás para ella (que está en el libro), porque falleció poco después de que nuestra hija cumplió un año de edad.
El cumplir de años es el tema del primer libro que leí el martes a mi nieta. El libro cuenta eventos en la vida de Kikker (Rana), y aunque conoce bien la historia del "heel bijzondere dag - día muy especial", el cuento la fascinó nuevamente. El libro empieza con una escena de desayuno en la que Kikker se pregunta por qué el día iba a ser un día muy especial, como le había dicho Haas (Liebre).
Le pregunté a mi nieta qué le pasó a Kikker en el dibujo de la página del título (ve imagen de arriba). "Kikker está triste," me dijo, "Kikker is verdrietig".
Ahora puede pronunciar la r y ahora dijo que Kikker estaba triste en vez de decir que estaba llorando.
Sentado temprano detrás de mi computadora (el ordenador) primero leí varios artículos sobre el uso de carbón en la producción de energía eléctrica en Alemania y cómo reducir la emisión de dióxido de carbono y de NOx en la Shipping Industry y algunos otros artículo. Luego leí el primer libro que Aafke y yo hicimos de la vida de nuestra hija desde su nacimiento hasta que ella tenía dos años, la misma edad que tiene mi nieta, la hija de mi hija, ahora. Nuestra nieta estuvo aquí nuevamente el martes (anteayer), como de costumbre, pero esta vez junto con su pequeño hermano de cuatro meses.
Me sorprendió, aunque lo sabía, la semejanza entre mi nieta y mi hija. Hacen las mismas cosas conmigo y yo hago las mismas cosas con ellas. Se parecen física y psíquicamente. En el libro sobre la vida de nuestra hija, Aafke y yo describimos lo que ella hace, dice, quiere, y lo que nosotros hacemos con ella y lo que observamos. Es un libro rico en detalles de la vida diaria de nuestra hija.
Lo que también me llamó la atención es cuánto viajamos con ella antes de que tuviera un año, a España, a Francia, a las islas holandesas. También es un libro de la muerte anunciada de mi madre, que gozó tanto de su nieta y estaba tan ansiosa por conocerla y verla crecer. Escribió un solo poema de San Nicolás para ella (que está en el libro), porque falleció poco después de que nuestra hija cumplió un año de edad.
El cumplir de años es el tema del primer libro que leí el martes a mi nieta. El libro cuenta eventos en la vida de Kikker (Rana), y aunque conoce bien la historia del "heel bijzondere dag - día muy especial", el cuento la fascinó nuevamente. El libro empieza con una escena de desayuno en la que Kikker se pregunta por qué el día iba a ser un día muy especial, como le había dicho Haas (Liebre).
Le pregunté a mi nieta qué le pasó a Kikker en el dibujo de la página del título (ve imagen de arriba). "Kikker está triste," me dijo, "Kikker is verdrietig".
Ahora puede pronunciar la r y ahora dijo que Kikker estaba triste en vez de decir que estaba llorando.
2 Comments:
Me encanta tu blog. Estoy leyendo varios, viendo las fotos de cuando erais jóvenes... ¡Fantástico!
También te puede gustar mi página en Facebook: https://www.facebook.com/giovanni.zambrone
Post a Comment
<< Home