También podría decir, en vez de, o más encima, la paz del mar y del amar, y el gozar del mar y del amar, y, por fin, la alegría del estar del mar y del amar.
Tenemos que alimentarnos cada día, si es posible, con algo que nutre (satisfaga) el cuerpo y el espíritu (no tengo ninguna religión en específica y si tenga alguna esté basada en la naturaleza). Besos
Yo soy, creo, de interior. Más bien me siento de interior, pero no rechazo el mar, por supuesto. Pensándolo mejor, creo que rechazo las aglomeraciones de verano en las playas, y lo que se deriva de eso, pero en Galicia no vi esas aglomeraciones, aunque solo estuvimos en un par de playas. Ayer volví a pasar por Los Monegros, y ese, entre otros pero sobre todo ese, es el paisaje de mi juventud. Durante muchos años no era un paisaje valorado, ahora, algo más.
José Luis, hemos hablado una vez de eso (en tu blog creo): los del interior y los del mar. Los Monegros me suena como un paisaje que tiene que ver con Montenegro, pero claro, no tiene nada que ver. Nunca he estado en Montenegro, creo. Sí, esos cambios se dan: de repente valoran un paisaje. Por qué será?
11 Comments:
Amar y amor cambia una solo vocal
pero el mismo significado, y si le
añades mar, es inmensidad, alegria, paz, contemplación....gozo.
Un abrazo.
Poesía y alimento para la vista y la vida.
Hermoso, muy hermoso.
Besos.
Me encanta la mar o el mar como metafora de inmensidad.
Un abrazo
PD: sería posible escribir un poema más o menos original sobre el mar?
Tenemos que alimentarnos cada día, si es posible, con algo que nutre (satisfaga) el cuerpo y el espíritu (no tengo ninguna religión en específica y si tenga alguna esté basada en la naturaleza).
Besos
Yo soy, creo, de interior. Más bien me siento de interior, pero no rechazo el mar, por supuesto. Pensándolo mejor, creo que rechazo las aglomeraciones de verano en las playas, y lo que se deriva de eso, pero en Galicia no vi esas aglomeraciones, aunque solo estuvimos en un par de playas. Ayer volví a pasar por Los Monegros, y ese, entre otros pero sobre todo ese, es el paisaje de mi juventud. Durante muchos años no era un paisaje valorado, ahora, algo más.
Un abrazo
Un abrazo
José Luis, hemos hablado una vez de eso (en tu blog creo): los del interior y los del mar. Los Monegros me suena como un paisaje que tiene que ver con Montenegro, pero claro, no tiene nada que ver. Nunca he estado en Montenegro, creo.
Sí, esos cambios se dan: de repente valoran un paisaje. Por qué será?
Un abrazo
Yo nací y viví entre el viento y el mar y, he de reconocer, que cuando junto las dos cosas me siento el doble de lo que soy. Saludos.
Me gustó mucho lo que dijiste, Jesús, lo repetí en voz alta, traducido al holandés, a mi compañera. Saludos
de estar en el mar amando....
linda foto
Abrazos
Myriam:
1. sí, es posible
2. estoy de acuerdo
Un abrazo
Post a Comment
<< Home