Tuesday, January 31, 2006

Knesebeckstrasse 48, Berlin

En el post anterior mencioné la dirección en Berlin de Marianne Levy-Davidsohn, la muchacha que escribió una carta a mi madre desde Berlin el 20 de octubre 1937. La dirección de la casa donde vivía como "au pair" era Knesebeckstrasse 48. Por medio de Google acabo de encontrar en Internet la siguiente información:

Königsberger, Felix Fritz Willy *21.02.1884, verstorben im KZ Dachau am 23.04.1945

EF: Herta Elvira geb. Schönfelder gesch. Holst *13.09.1902 Köln-Ehrenfeld nach anderen Q. 29.01.1891 Berlin, verstorben 15.12.1983 in New Jersey/USA

2 Töchter: - *06.08.1920 Berlin, verstorben 18.04.1976 Rhode Island in den USA

- *15.09.1916 Berlin, lebte 2002 noch in Israel

Dr. med., Arzt und Landwirt

Wohnanschrift: Berlin W15, Knesebeckstraße 48-49 bzw. Friedrichstraße 155-156

Emigration 1933 nach Frankreich, Paris später Nizza.

No necesitas conocimiento del alemán para entender que en esta casa en el Knesebeckstrasse en Berlin ha vivido una familia judía antes de la guerra mundial y que Felix Königsberger murió en el campo de concentración de Dachau el 23 de abril 1945. En la carta a mi madre la Marianne Levy-Davidsohn cuenta de sus aventuras con una niña de 12 años, a quien ella tenía que ayudar con sus tareas y salir paseando por las calles y los parques del barrio. Se queja en la carta de la arrogancia de esa niña. Rehúsa asentarse en un banco al lado de gente con traje humilde. "Ich bin was besseres! Soy mejor que ellos," dice la niña. La Marianne no la hace la culpa, sino a los padres. Y agrega que, por supuesto, escoge cada vez un banco donde están asentados gente en traje humilde. Sin embargo, la niña quiere mucho a Marianne. "Cada momento me dice ella: 'Ach, Sie sind so süss! Ah, Usted está tan dulce!'"

Otro de los muchos nombres que están en este sitio de Internet es de Franz Herzberg, un apellido conocido en Holanda. Hay un arquitecto holandés bastante famoso que tiene el mismo apellido. Hay también una poeta muy buena, Judith Herzberg, que veo de vez en cuando donde un amigo cineasta. Sobre Franz Herzberg dice el sitio lo siguiente:

Herzberg, Franz *07.06.1901 Gleiwitz, lebte im Mai 1945 noch vergl. Foto im Aufbau vom 04.05.1945 S. 32 und Annonce vom 19.10.1945 , nach anderen Q. am 01.10.1944 im KZ Auschwitz ermordet

EF: Hertha geb. Lustig *28.03.1898 Kattowitz

Feldbahnkaufmann

Wohnanschrift: Berlin-Grunewld, Trabenerstraße 14

Emigration 1937 nach Holland, Amsterdam, später deportiert nach Bergen-Belsen.

Monday, January 30, 2006

Marianne Levy-Davidsohn

Mi mente funciona como el juego de dominó. Ayer puse una foto de mí tomada en el jardín de un castillo en el norte de Italia donde estuve de visita con mi compañera y ahora pongo una de ella, en un otro viaje por Italia, también en el norte. Fuimos en bicicleta de Venezia a Firenze. Aquí estamos subiendo al Passo della Futa, hacia una altura de 1200 metros si no me equivoco, en bicicletas 'normales' holandesas. A mi compañera nunca le ha gustado subir cuestas y ya se ha bajado para caminar. Yo soy (¿o era?) el contrario: las veo como un desafío.

Ayer hablé de uno de los desafíos en mi trabajo: crear un ambiente en que la gente se expresa libremente, se siente en casa. La otra cara de la medalla es autocensura. Bueno, gracias a esa autocensura comencé el blog, primeramente como un ejercicio un poco solista y de poco a poco voy sintiendo el encanto del intercambio con ustedes (ya ven que aprendí a hablar castellano en América Latina).

Me doy cuenta que escribo un poco al lote y que anuncio muy a menudo que voy a escribir sobre algo y después no lo hago. Me doy también cuenta de que cometo errores, no, ésta vez no me refiero a las gramaticales y de estilo, bueno, cada uno tiene su estilo, y ya sé que tengo que 'vivir' con mi poca capacidad expresiva en castellano. No, ésta vez me refiero a errores como el de ayer cuando dije que Nouriel Roubini participó en un foro en Ginebra, mientras que fue en Davos. Él participó en un foro que se dice de prestigio, pero ¿qué es prestigio?, el World Economic Forum.

Interrumpí mi escribir un ratito para chequear si no estuviera equivocándome otra vez con esto de Ginebra y Davos y descubrí una cosa interesante: no tengo acceso al blog de Roubini por la siguiente razón: "You've tried to access RGE Monitor content that is restricted to RGE Monitor users." Es que Roubini empezó su blog como debe ser, gratis, y hace medio año lo ha limitado a gente que le paga una suscripción. No sé por qué miracolo logré entrar en su blog ayer.

Mi mente no solamente funciona como el dominó, sino salta de una cosa a otra. Bueno, podría decir que tengo una mente asociativa, que es verdad, pero... Sí, lo reconozco, tengo también una mente desordenada. Es que pasan tantas cosas por mi cabeza. Como, por ejemplo, la carta que esa chica judía le mandó a mi madre, desde Alemania, antes de la guerra, la segunda guerra mundial. El nombre de esa muchacha es Marianne Levy-Davidsohn, si descifro bien su escritura. Vivía en Knesebeckstrasse 48 pt, en Berlin. El timbre de la carta es de 25 centavos, muestra la cara de un hombre que no conozco, y dice simplemente "Deutsches Reich".

Me imagino que alguien en este mundo debe saber qué lo que le ha pasado a Marianne Levy-Davidsohn. ¿Cómo vivirá esa persona? ¿Qué pensará en este mismo momento?

Camisa blanca


No logré incluir la foto más reciente de Nouriel Roubini en el post anterior. Aquí está, a la derecha. La otra persona, a la izquierda, soy yo, de visita en Italia. Supongo que Roubini es más joven que yo, porque empezó su carrera académica en 1982 y yo la mía (no académica) unos 10 años antes.

Viendo el resultado de este post en la pantalla de mi ordenador veo muchos hombrecitos juntos en pocos centímetros, un poco vanidosos, como son los hombrecitos, sobre todo los machos, pero creo y espero que estos dos no sean demasiado macho, porque no me gusta lo macho, o sólo cuando lo muestran con gracia e ironía. De todas maneras, espero que este texto agregado crea un poco más de distancia...

Personas simpáticas

Acabo de leer un blog que visito de vez en cuando para enterarme de las ideas que tiene un italiano sobre la economía internacional, que es el tema de mi trabajo. El italiano se llama Nouriel Roubini. Como pueden ver aquí al lado, es un tipo relajado, un poco con el aire del inspector Colombo, pero menos distraído, o mejor dicho, aire de ser distraído. Es un tipo lúcido que casi siempre me da algo para reflexionar.

En su último post Roubini cuenta cómo el ministro de finanzas de Italia le había insultado en un foro en Ginebra, gritándolo: Váyase a Turquía... Es que Roubini nació en Turquia. Después ha vivido unos 20 años en Italia y por fin aterrizó en los Estados Unidos, donde tiene fama como un académico con visión original. Sostiene, entre otras cosas, que la deuda externa gigantesca y creciente de los EEUU es un problema que requiere una solución, mientras que muchos (sobre todo los 'policymakers' por supuesto) digan que no, que con mayor coordinación entre los países ricos se resuelva el problema.

Bueno, resulta que el problema de la deuda externa de los EEUU no es un problema nuevo y resulta que es un problema que a mí me incentivó a mediados de los años 80 de formar un foro internacional de discusión sobre la crisis de la deuda externa de los países en desarrollo, desde la perspectiva de mejorar la suerte de la gente que tiene poco poder y que son pobres y marginalizados. Y resulta que en 4 semanas voy a moderar una reunión en que un grupo de académicos como Roubini y "policymakers" van a discutir el problema de la deuda externa de los EEUU.

Como siempre, ya estoy anticipando como se desarrollará la discusión en esa reunión. Y como soy el moderador tengo la libertad de decir lo que quiero. Pero como soy también la persona que debe crear un ambiente simpático, de confianza, para promover un debate amplio y creativo, tengo que tener cuidado con lo que digo. Tengo opiniones muy radicales que expreso solamente entre amigos. Algunos de los participantes son mis amigos, pero no todos. Tampoco son enemigos, por supuesto que no, porque son personas simpáticas. Me ven a mí también como una persona simpática... ese es mi problema.

Nouriel Roubini habla italiano, inglés, hebreo y farsi. En su website ha actualizado su foto. Ahora tiene una cara más seria que en la de arriba. Voy a ver si logro incluirla y si no logro tal vez la pondré en un próximo post.

Sunday, January 29, 2006

Los mundos se acercan


Pau ha creado un blog de opinión, hace poco, y en su blog original sigue escribiendo sobre un hombre con el nombre Pombo. Me fascina lo que escribe sobre Pombo y me encanta su empeño para crear un espacio de diálogo, que el mismo incentiva con alguna reflexión suya. Y como Pau tiene un estilo muy original me encanta participar. El único problema que tengo es que escribo comentarios demasiado largos y, tal vez, demasiado personales. Mi intento no es escribir todo el tiempo sobre mi mismo o sobre mi familia (muerta), pero me cuesta evitarlo. Y aunque a alguna gente le gusta que ponga de vez en cuando una vieja foto del archivo "familiar" mío, empiezo a tener vergüenza que enfatizo tanto la importancia (para mí) de mis parientes cercanos y lejanos. La única excusa es que me interesan mucho mis amigos y que estoy curioso de saber como anda "la otra persona", las personas que no conozco pero a quienes me siento cercano, como ser humano.

En su último post, "Las identidades como problema", en su blog de opinión, Pau dice lo siguiente:

La lucha en el mundo es por las diferencias. Diferencias políticas que apenas existen. Diferencias religiosas que tampoco son claras y suficientes... Las guerras de religión han dejado de ser un motivo. Diferencias económicas y, esas, al hombre, se nos escapan en principio, esas tan solo las podemos remediar con tesón y generosidad, por parte de unos y con lucha personal y sin vergüenza, por parte de los otros.

Después sigue Pau:

¿A más cultura, más identidad?

No sé. Solo sé que las distintas culturas producen distintas identidades. No sé si, a más cultura se produce más diferencia de identidad. No sé si es así o todo lo contrario.

Las “culturas”, como más fuertes, más problemas de confrontación tienen entre ellas. Eso está claro.

Los musulmanes poseen una fuerte cultura, entonces, les es más difícil integrarse en cualquier otra. Así sucede también con los occidentales-helénicos y los orientales, dejo lo de confucianos para no liarla.

Entonces, si algo tenemos claro, es que debemos combatir la identidad como diferencia y dejarla como cultura.

Yo como cerdo. Tú, Hassan, comes cabrito (o todo animal que no se alimente de lo mismo que el hombre.) Y tú, Hui, comes perro y lagarto... No hay más, idiomas distintos y distintas costumbres. Por lo menos, no debería haber más.

El mundo es un pañuelo y lo hemos de compartir como sea. Ya vendrán los marcianos algún día, para que nos podamos hacer preguntas más profundas sobre las diferencias de identidad.

Hasta aquí lo que dice Pau. Después de haber escrito un comentario a lo de Pau, me di cuenta que empecé este blog mío hace medio año por necesidad, por necesidad de crear un mundo que sea distinto del de mi trabajo. Veía mi mundo de trabajo como vacío de "emociones", y lo de mi blog como lleno de emociones. Ahora noto que estos dos mundos diferentes se están acercando, mezclando, de poco a poco.

Ahora no sé qué foto podría acompañar este post. Las otras veces empecé con una foto que por si sola arrancó el escribir de una reflexión. Vamos a ver...
¿Qué les parece una foto de Nicaragua, tomada en 1982, cuando mi compañera y yo estuvimos viviendo tres meses en este país centroamericano?

Friday, January 27, 2006

Historias guardadas

La foto que no logré incluir al final del post anterior es ésta. Dije que muestra una escena de la juventud de mi bisabuelo hijo de pequeños agricultores, pero igual hubiera podido decir que es una escena que recuerda a mi juventud. La foto viene de un libro sobre la agricultura en Holanda y fue sacado por Cas Oorthuys. Hace poco un amigo me mandó por correo electrónico una canción ilustrada con cuadros de Vincent van Gogh y tuve que pensar a ésta foto y todo lo que ella había creado de imágenes y historias guardadas en mi memoria de joven, descendente de antecesores que llevaron sus vidas en el campo, en Holanda, en el sur de Italia y quien sabe en qué otra parte de la planeta. Se piensa que nuestros antecesores más lejanos son de África. A través de mis lazos familiares actuales y los del pasado y también a través de mis amistades actuales me siento ligado con el mundo entero.

Monday, January 23, 2006

Mundos diferentes

Me desperté esta mañana temprano pensando a la foto arriba. Son mis padres en el día de casarse, en diciembre 1942, en plena guerra mundial. Curioso, ahora la veo como menos dramática que hace una hora cuando estuve todavía en la oscuridad de nuestro dormitorio, en cama, sin moverme para no despertar a mi esposa al lado de mí. La veía más oscura, la foto, y más amplia, mostrando más del interior del bus tirado por un caballo y alquilado para transportar a los que asistieron a la boda.

Asistió también un primo de mi madre que sacó esta foto. Encontré la foto en una sobre, junto con otras de la boda, también tomado por él. En una carta habla de la falta de líquidos y papel para imprimir fotos. Conozco el nombre de este primo, pero nunca lo he conocido personalmente. Sólo conozco la historia que me contó mi madre. Le detuvieron los alemanes a causa de sus actividades en la resistencia holandesa y le asesinaron. También detuvieron a otro primo de mi madre, en el mismo momento porque estaba de visita cuando llegaron los alemanes. Este otro primo tenía nada que ver con la resistencia, pero igual lo asesinaron.

El abuelo de estos dos primos (hijos de dos hermanos) era también el abuelo de mi madre. También tuve que pensar a él, mi bisabuelo que empezó su vida como hijo de un pequeño agricultor y herrero (para caballos) y que tenía tantas ganas de conocer al mundo geográfico, económico y político que decidió de seguir estudiando, primeramente para ser profesor en una escuela primaria, y después siguiendo y siguiendo hasta obtener un doctorado en Alemania y fundar la geografía económica en Holanda y escribir un sinnúmero de libros sobre diferentes países en el mundo y muchos sobre Holanda. Tiene también una autobiografía que terminó justo antes de cumplir 80 años y que no ha visto publicado.

Es un gusto leer sobre su juventud en el campo. Describe escenas como las que se ve en la foto de abajo, si logro incluirla aquí en el blog. Creo que esta foto va bien con la foto de mi post anterior. Me refiero a la foto de un campo que no sé donde esté. ¿El sur de Italia? A Reflejos la hizo pensar a su juventud en el campo en el sur de España...

Fotos incentivan la imaginación. Yo me imaginé parte de la vida dramática de mis padres, en la oscuridad del dormitorio, en base de la foto arriba. Estas dos personas crearon el joven que está entre diferentes mundos: Italia, Holanda, España, Sudamérica, el campo, la ciudad, hijo, padre, director, trabajador, escritor, lector, soñador, activista. Y siempre vuelve al campo o al mar, donde encuentra paz y tranquilidad.

Me dispiace... No logré incluir la otra foto. Vendrá en un otro post.

Saturday, January 21, 2006

Foto desconocida

Estoy experimentando con fotos en mi blog. Textos puedan crear imágenes y fotos puedan crear textos, pero ya estoy tan metido en el trabajo de textos en mi trabajo (empecé a editar textos a los 26 años... ya son más que 30 años que estoy en esto!) y ya he dedicado tantas horas al escribir y rescribir mi novela no publicada que prefiero mirar a fotos en vez de escribir cuentos. Pero me gustan mucho los cuentos de otros, como por ejemplo los de Reflejos o Pau.

Zuriñe me sugirió en su último comentario que escriba yo la historia de mis antecesores, de mis bisabuelos, de mi nonna napoletana... y yo la contesté que preferiría juntar a mis bisabuelos, a todos o a un número reducido de ellos, en un hotel al bordo de un lago o al bordo del mar donde en la noche se ve girar la luz del faro lo que le inspira a una bisabuela de contar una historia sobre su papá farista (hombre de faro) y donde durante el día un bisabuelo italiano se asienta al lado del mar en una silla bajo un parasol y le cuenta a una bisabuela alemana cuánto ha echado de menos a sus nietos después de su emigración al norte de Europa, y después se juntan todos los bisabuelos para el almuerzo y empiezan a hablar sobre el tiempo en que viven y de repente parece que no están hablando de su tiempo sino del nuestro... Bueno, todo esto no lo dije a Zuriñe, lo pensaba solamente. Y podría seguir imaginándome una tal reunión de bisabuelos y escribir el guión de una "película", pero no lo hago y no lo haré porque estoy en otras cosas.

La foto arriba viene de la herencia de mi abuela italiana (creo) y no tengo la menor idea quien ha sacado ésta foto, ni donde está... Alguien tiene una idea?

La foto abajo es de un joven que 'asomiglia' un poco al encuadernador de libros, creo. Pero pueda ser que me equivoco. No sé como poner texto al lado del joven y por eso queda un poco solo. No importa, está bien así. Y si no, lo voy a quitar simplemente.


Friday, January 20, 2006

Encuadernador de libros

Estoy en trabajos serios para el foro internacional que dirijo (suena raro) sobre economía internacional y países en desarrollo. Este señor al lado nuestro con su cara seria acompaña bien mis (nuestros) trabajos serios.

Él, en su época, estaba también haciendo un trabajo serio, que tiene que ver con uno de mis empeños actuales: la producción de un libro sobre África y la economía mundial. ¿Como lo sé? Porque este señor es el papá de mi abuela holandesa, no de la italiana. Él tenía como profesión la encuadernación de libros. Era encuadernador de libros. Suena lindo, ¿no?

Además, este bisabuelo mío vivía y trabajaba en La Haya, donde se encuentra mi oficina. Yo nací en La Haya, pero después de tres meses me mudé. Nunca me ha gustado mucho La Haya, aunque es una ciudad agradable.

Monday, January 16, 2006

Viaje a Paris

Este fin de semana estuve en Paris, junto con mi compañera de 38 años (de vivir juntos). Viajando hacia Paris en tren leí el libro de Joseph Roth, La Cripta de los Capuchinos (1938), y volviendo a Amsterdam el domingo por la noche lo terminé. El libro de Roth me acompaño en este viaje como un testigo con quien tuve un diálogo constante, sin hablar, sólo susurrando, silencioso.

Mais aussi j'avais des discussions avec nos amis, él (36 años, Parisien) y ella (26 años, de Latvia, Israel) y él (82 años, czecho, viviendo en Paris después de muchos años de exilio en los EEUU y otros países). Y mientras tanto visitábamos una exhibición sobre melancolía y otra sobre la destrucción y la creación en el siglo XX... Y todo parecía decirnos lo mismo: en qué mundo estamos viviendo?

La historia del siglo XX está todavía muy presente, vivimos con ella, sin entender muy bien lo que estamos viviendo. En algunas cosas hemos avanzado y en otras atrasado. Seguimos destruyendo y creando y seguimos adaptándonos y callándonos.

Ésta mañana, durante el desayuno, dije a mi compañera: 'No logramos cuidar los diálogos con nuestros amigos... No logramos escribirles una carta larga y seguir la conversación...'
'Yo trato de hacerlo,' me dijo ella.

Pensaba incluir una foto de la exposición "Big bang: destruction et création dans l'art du 20-e siècle" à Centre Pompidou, pero abriendo mi archivo de fotos elegí ésta, tomada en 1958 (pienso), en la escuela primaria.

Sobre el escritor Joseph Roth (1894-1939) encontré en Internet lo siguiente, en inglés (en un website de Jon Hughes), pero como varios de los libros de Joseph Roth han sido traducidos en castellano...

Joseph Roth remains little known outside the German-speaking countries, despite being amongst the most prolific and talented writers of the twentieth century. He is best remembered for two novels recreating, respectively, the shtetl of the Eastern Jews (Hiob or Job, 1930), and the vanished world of the Habsburg monarchy (Radetzkymarsch or The Radetzky March, 1932). However, Roth was one of the best-known and highest paid journalists in the Weimar Republic, whose articles and Feuilletons about Berlin, Paris, Russia and other places seemed to capture the energy and ambivalence of the Zeitgeist, a culture dazzled by competing ideologies, new technologies, and a burgeoning entertainment industry. His novels from the 1920s, the most famous of which is Die Flucht ohne Ende (Flight without End, 1927), portray a damaged generation of young men and women as vividly as those of Hemingway or Fitzgerald.

Further, his life was in many ways an extraordinary one. Roth was born to German-speaking Jewish parents in fin-de-siècle Austria-Hungary, close to the border with Russia. Though he is often thought of as an archetypally 'Austrian' writer, his place of birth, Brody, was located many hundreds of miles away from Vienna. Today it is part of the Ukraine. Roth grew up in a diverse community, in which Jews and gentiles, German, Polish, Yiddish and Ukrainian speakers, and soldiers, farmers and tradespeople lived cheek by jowl. The sense of loss he felt with the disappearance of this community, which could not survive the collapse of empire, was to mark Roth profoundly. His work frequently revolves around the feeling of being literally and metaphorically homeless.

Roth, in his journalism and in his fiction, looked to greater values than the merely political or pragmatic. The parochialism of German and Austrian society, and their intolerance of difference, depressed him deeply. In his work he sought to celebrate and defend our common humanity, drawing on his provincial childhood, his Jewishness, the experience of war, revolution and social upheaval, and the restless, hotel-dwelling lifestyle of a cosmopolitan journalist.

Ultimately, as with so many of his co-religionists and fellow liberals, Roth was forced into exile, which he spent for the most part in Paris, a city he loved. His final years were characterised by financial troubles, acute alcoholism, and an increasingly eccentric political stance (despite the socialist attitude of his early years, he favoured the re-establishment of the Habsburg empire). Yet he continued to write until the last, and was a tireless and vocal opponent of Hitler's regimes and its supporters. His final work, Die Legende vom heiligen Trinker (The Legend of the Holy Drinker, 1939), is amongst his finest. The tale of an alcoholic seeking redemption by repaying a loan reflects both Roth's ambiguous spirituality, and his belief in the necessity of justice, of balancing the scales.

This website is entirely the work of Jon Hughes.

Friday, January 13, 2006

Nonna napoletana

Todavía no he tenido tiempo para escribir esa historia de los cien años de silencio y como acabo de leer un comentario de illa (de Barcelona) sobre las muchas fotos que tengo de mis abuelos y bisabuelos (y hasta los padres de mis bisabuelos) aquí les pongo una foto de mi abuela italiana, tomada en Capri.

Espero poder escribir la historia de los cien años pronto, pero como ya les dije me gusta hacerlo con calma.

Mi abuela es la chica al lado izquierda en traje oscuro.

Intermezzo

Habiendo leído hace un minuto el comentario de Zuriñe a mi post anterior pongo aquí una foto de mi mamá. No sé lo que está haciendo ella y por qué anda en ésta bicicleta de transporte. Es un modelo de bicicleta que he visto muy a menudo pasando por las calles de mi pueblo cuando era joven. El panadero solía pasar por las casas vendiendo sus productos a las amas de casa, mujeres por supuesto en aquel tiempo.

Ayer dejé el post anterior sin haberles contado la historia que quería contar... Ahora voy a tratar de concentrarme sobre ella, pero es posible que tarde un poco porque hay cosas de mi trabajo que me llaman a pesar de que hoy debiera ser mi día libre... Debe ser que amo a mi trabajo. En serio, y en broma.

Thursday, January 12, 2006

Cien años de silencio

Después de dos posts con fotos en blanco y negro ahora una foto en color que saqué en Calabria. Tiene una luz que me gusta, que me atraiga y que me hace volver a los días en que estuve tratando de rescatar en Calabria las historias de mis antecesores italianos "después de 100 años de silencio" como dije en mi comentario en el post anterior.

Ésta historia de mi búsqueda en Calabria que empezó con un descubierto completamente inesperado en mi casa en Holanda es tan linda, increíble y consolando que la quiero contar con calma. Pero ya les puedo decir que ella sigue ejerciendo una influencia efervescente sobre mí. Una simple mirada a ésta foto tomada en Tropea es suficiente para reproducir el brote de optimismo y energía que provocó mi vagabundeando por los pueblos calabreses.

Les voy a contar ésta historia cuando he terminado mi trabajo de hoy. Mientras tanto espero que la foto les de a ustedes igual brote de optimismo y energía.

Tuesday, January 10, 2006

Historias perdidas

Tengo cartas de una jovencita quien estuvo viviendo un rato en la casa de mi mamá antes de la segunda guerra mundial. Mi mamá era la mayor de ocho hijos y supongo que esa jovencita ha cuidado a los hermanos menores de mi mamá. Se llama Marianne (o Miriam?) Davidson, esa jovencita, y cuando leí sus cartas, enviadas desde Alemania donde había vuelto, antes de la guerra, me pregunté si ella hubiera sobrevivido la guerra.

Tengo fotos de tantas personas (hasta de mis bis-bisabuelos) que no sé de todas quienes son. Aquí se ve a mi padre, en una playa en Holanda. Él nació en 1914 y supongo que en ésta foto tenía unos 20 años. Fue la época en que él tuvo una pequeña orquesta del cual encontré hace poco un disco de 78 giras, con dos números: Tango des Roses y Marèva. Mi papá tocaba la trompeta. Marèva es una rumba, creo.

Mis padres son muertos ya muchos años (mi papá murió a los 41 años) y no hay nadie quien me podría contar lo que le ha pasado a la jovencita Davidson, ni cómo fue esto de la orquesta de mi papá. Son historias perdidas.

Thursday, January 05, 2006

La foto de Pau

Los jóvenes están por todos lados. Son mayoría si no me equivoco. ¿Alguien sabe? Debe haber una estadística. Incluyendo los viejos jóvenes como yo y Juan y Pau somos una grande mayoría.

Estos jóvenes en Nicaragua ya son adultos. Tomé la foto en 1982 durante una estadía de tres meses en este país centroamericano. Ayer Pau me mandó por correo electrónico la foto que él recién había puesto en su blog. En la foto de Pau se ve a su amigo E quien está gravemente enfermo. La foto de Pau me emociona, no solamente porque reconozco sino también porque sé que los jóvenes mueren también.

Despertándome temprano ésta mañana volvió la conversación que tuve ayer con mi hijo. Él me contó que pasan días en que su amiga y él hablan poco. 'No es extraño,' me dijo, 'porque se pueda hablar de sólo tres cosas: tu mundo, la tierra y el mundo del otro.'

Aunque éstas tres cosas dan mucho para hablar soy un poco (¿o mucho?) como mi hijo: veo y capto el mundo en conceptos abstractos. Sin embargo lo veo también en conceptos y experiencias concretas, que no tienen límites.

La abstracción pueda ayudarte a entender cosas, de ti mismo, de otras personas, del mundo. En mi trabajo (sobre la economía internacional y los países en desarrollo) aprovecho de mi capacidad de abstracción y en mi vida personal también.

Hace poco un profesor de economía de la University of California (él viene de Malasia) quien ha aportado un capítulo a un libro sobre África me dijo: "You have written a truly masterful integrative essay that highlights the analytical strengths and weaknesses of each paper... You have summarised my paper so well that it clarifies and strengthens my thinking on some aspects."

Pensar es parte de vivir. Pienso a Pau y su amigo. Y pienso a los jóvenes del mundo.

Los jóvenes del mundo

Como dije hoy a Clo, ya es tiempo para incluir una foto de mi hijo. Gracias a un cuentito que escribí hace años sobre él (en inglés: "Don't cry, my little son") surgió el castellano como idioma en mi blog.

Los primeros meses escribí mi blog en holandés, un idioma en que me sentí menos libre que en castellano, hasta el momento en que incluí el cuentito sobre mi hijo y lo traduje en castellano e italiano (malo).

Jóvenes como mis hijos están tomando fuerza para contribuir al mantenimiento y mejoramiento de nuestro mundo. Ésta mañana leí el post de otra jóven, Illa. Ella es una muchacha que vive y trabaja en Barcelona. Voy a copiar lo que escribió ella y también algunos de los comentarios a su post incluyendo el mío.

Escribe Illa:

Estas Navidades yo también me preguntaba hacia qué mundo nos dirigíamos.
¿Realmente están mejorando las cosas? ¿Nuestro nivel de vida? Y si es así, ¿a costa de qué?
No importan las utopías que quepan en mi cabeza, importan los hechos. Y los hechos son grises, austeros y deficientes.
El asalariado es el esclavo moderno. Sí. Parto de esta premisa. Que me parece tan cierta como el peso de la realidad (aunque haya días en que esa realidad parezca volátil).
Hoy en día son necesarios dos sueldos para acceder a una vivienda (y algunas ni dignas). Son necesarias horas extras o trabajos dobles para pagar las hipotecas. Hipotecas de hasta a 40 años (y a 50 para los más jóvenes). Horas extras que muchísimas empresas no pagan, pero que el trabajador se siente coaccionado a realizar, sino quiere ser despedido.
Sociedad del consumo en que un cortado vale 1 euro, un viaje de tres zonas 2,90, una copa en una discoteca 12 euros, un menú del día ronda los 8 euros mínimo y llegar a los 1000 euros al mes se considera óptimo y buena suerte (??!!).
Supongo que ése es el panorama general.
Y mientras tanto, nos aferramos a nuestro sentido de supervivencia, ilusiones y esperanzas, gracias a las cuáles hemos llegado hasta dónde hemos llegado. Grandes valores del ser humano, nuestros verdaderos tesoros.
Yo creía que si todo el mundo actuaba de acuerdo a unos valores universales que todos consideramos óptimos, si todos nos negamos a aceptar las injusticias del sistema, si rechazamos el ser explotados y nos rebelamos..las cosas podrían cambiar.
Y aún lo creo.
Pero nunca nos pondremos todos de acuerdo ni todos nos negaremos en redondo (jamás todos los chinos saltarán a la vez, en el mismo segundo). Los jóvenes lo tenemos más fácil, pero es diferente cuando vas asumiendo responsabilidades y otras personas dependen de ti. Cuando hay más cosas en juego y miles de factores coartan tu libertad de acción, e incluso de expresión.
Si hay intereses mayores que guían a los medios de comunicación, no es diferente nuestra vida, cuyos patrones cortan nuestros superiores.
Desechada esta posible solución, queda la alternativa de convertirse en empresario (sólo aquellos con iniciativa se considerarán libres). Pero una sociedad formada únicamente por empresarios dudo mucho que sea factible, y debe distar bastante de una sociedad perfecta. Se vuelve a hablar en términos de privilegiados, y no tan privilegiados.
Única vía posible: el gobierno. Votar a partidos políticos que realmente nos lleven al cambio. Que utilicen su poder para mejorar estas insuficiencias y dar un vuelco al sistema. Que sea capaz de desligarse de los cordones umbilicales que los unen a intereses puramente económicos y tenga su único punto de mira en el hombre.
¿Cómo conseguir que la gente vote al partido correcto, que distinga entre los hombres de principios y los simples bufones? Más cuando tienen como fuente primaria y casi única la TV, cuando no les interesa la política y desconfían de todo lo ajeno.
Formación. La formación se presenta siempre ante mí como la base necesaria de todo. Formar a las personas para que aprendan a hacer juicios de valor. Para que tengan en cuenta no sólo las fuentes que se les otorga sin esfuerzos, sino que sean activas política y socialmente y busquen, investiguen, critiquen..
Una sociedad sin espíritu de crítica, sin población que se incline hacia el autoanálisis... estará siempre condenada a la esclavitud.

Comentario Zifnab: Para empezar tendría que existir ese partido y yo no se porque, dudo mucho de que eso no pueda ser sino una ilusión. Y las cosas están tan enquistadas que la democracia no sirve para arrancarlas y fuera de la democracia los que no existimos somos nosotros.
Soy pesimista por vocación, más si cabe en las cosas que atienen a nuestro querido mundo. Todo ha de partir de decisiones individuales, pero todos estamos llenos de egoísmos y de ataduras que nos impiden ser valientes. El propósito de que el mundo cambie no solo es loable es necesario. La resignación y la decadencia siempre van de la mano, pero una cosa es esa y otra es el realismo. Y la realidad es que todo seguirá igual nosotros apegados a nuestras hipotecas y los políticos amarrados a sus escaños.
Y así una era y otra.
Y aún así se puede ser feliz, sobre todo si la suerte te lleva a nacer en el primero de los mundos y no escoge el quinto o el sexto que nosotros creamos.

Comentario Steam Man: Tengo exactamente las mismas inquietudes que tu respecto al sistema... la cosa está fea y veo en "breve" un pedazo de explosión de esa burbuja que nos dará en todos los morros, si una cosa hemos aprendido de la historia es que nadie se rasca hasta que no le pica y de momento todo va bien (esto es lo que dice piso a piso alguien que se tira desde un rascacielos) de momento todo va bien, de momento todo va bien... pero lo importante no es la caída si no el aterrizaje.

Comentario Giovanni: Lo dices todo muy bien. Tienes "la película clara" como dicen los chilenos (y otros latinoamericanos?). Esto me da optimismo sobre las posibilidades de mejorar "el mundo", nuestro mundo. Sin nosotros este mundo socioeconómico (y político y cultural) no existiera; es creado y mantenido y sigue cambiándose gracias a los que mandan, obedecen o se encuentran al margen. En los años sesenta creía en la posibilidad de mejorar el mundo y sigo creyendo en la posibilidad de mejorar el mundo.
Hace poco estuve una semana en un pueblito cerca de Valencia. En la ciudad de Valencia veía que existe todavía un mundo de pequeños negocios, de gente juntándose en los bares para charlar, gente simpática... y tomé un cortado pagando 80 centavos. No tenemos que sentirnos frustrados (frustración lleva a la agresividad) ni impotentes. Tampoco tenemos que sentirnos los maestros del mundo. Pero sí tenemos que sentirnos sus habitantes que se encuentran un corto momento en ello para gozar de ello, ayudarnos y no destruir la naturaleza ni herir la vida del otro. Cada uno de nosotros ya hace algo muy positivo expresándose libremente y espero que dentro de nosotros salgan nuevos políticos que ayudan a crear un mundo mejor.

Comentario Pau: Precioso tema y preciosa reproducción de giovanni.
La realidad es que una chavala joven ha llegado a ese convencimiento, una idea que compartimos la mayoría, pero que cada uno de nosotros ve de distinta manera.
Mil soluciones para un problema. Algunos nos hacen creer que aquí reside el problema, en las malditas mil soluciones.
Tu sabes que no es así. Todos lo sabemos... o casi todos. El verdadero problema, es que los que no piensan así, son los que nos gobiernan.
Olvídate de lo de ser todos empresarios. Los pequeños empresarios no pasan de ser unos asalariados (esclavos) con ínfulas, ínfulas que, en el mejor de los casos, los arruinan íntimamente y, en el peor, físicamente.
Si te decides a serlo, cosa, por demás, muy sana, antes has de aprender la lección de que no serás ni más ni menos que tu vecino... Pero eso ya sé que lo sabes. Así y todo, te lo digo porque nunca es suficiente con saberlo, también hay que sentirlo día a día.
Las demás lecciones vienen con la experiencia.

Wednesday, January 04, 2006

Mirar hacia adelante

El futuro es ahora. Mañana haré las mismas cosas que estoy haciendo hoy, y otras cosas. En dos meses más estaré moderando un seminario internacional sobre el problema de la deuda externa de los Estados Unidos y cómo resolverlo para que el mundo tenga un sistema monetario internacional más estable y más justo. En tres o cuatro meses más espero visitar a mi hija en Sevilla. En seis meses más mi hijo va a cumplir 19 años. Un medio año no es nada. El mundo gira y quiero ver la película El cielo gira. Quiero ver también una vez más partes del film Il Postino, y escuchar los sonidos de ésta película: las olas del mar, la música melancólica, la voz napolitana de Massimo Troisi. Quiero escribir una novela sobre el mundo en que vivimos. Quiero cambiar el mundo. Felizmente no soy el único. Somos muchos. Juntos vamos adelante. El futuro nos invita, pero el presente también.